Crab sale de su ostracismo para decir que le dan mucha vergüenza:
Los discursos de algunos ministros.
Los discursos de nuestro presidente.
Los discursos de nuestra presidenta.
Los discursos de todos los candidatos.
Los discursos.
Que Cristina haya sido elegido presidenta.
Julio Grondona.
Que Julio Grondona haya sido elegido una vez más presidente de la AFA (casi tan malo como lo de Cristina).
Los que rodean y reeligen a Julio Grondona.
Moyano.
Barrionuevo.
Los gordos.
La droga.
El poder de la droga.
Los racistas.
Los violadores.
Los pedófilos.
Los barra bravas.
El poder de los barra bravas.
El portero de mi edificio.
El consejo de administración de mi edificio.
El administrador de mi edificio.
Mi edificio.
El racismo (de todo signo).
El fanatismo (de todo signo).
La homofobia.
Los homosexuales que pretenden que todos lo sean.
Las huelgas salvajes, que joden solo al pueblo.
El poder de los sindicatos que organizan esas huelgas.
Los piqueteros, que joden solo al pueblo, ya que los poderosos andan en helicóptero.
El poder que detentan los piqueteros.
Carlos Ávila, dueño (entre tantas cosas) de Torneos y Competencias.
El poder que tiene Carlos Ávila.
La TV de aire.
La TV de cable.
La TV.
El poder de la TV.
Que la gente se niegue a pensar.
Que un profesor gane menos que un camionero.
Que un médico gane menos que un camionero.
Que un juez gane casi igual que un camionero.
El poder que tienen los camioneros.
El poder, en general.
Que el poder esté siempre en manos de los peores.
Bush.
Condoleeza Rice.
Putin.
Sarkozy.
Berlusconi.
La Argentina.
El mundo, en general.
Ver que todo, sin remedio, parece encaminarse en el peor del los sentidos posibles.
Comparto la mayoría de tus vergüenzas. Y creo que se podrían agregar un montón más.
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