Del Potro

Se dió el gusto. Está en Shangai.
La recomendación general era: vas a Shangai, pero podés perder la Davis. No vayas. Tenés muchos Shangais por delante. Pero él se acordó de Cañas y Gaudio, a quienes también les dijeron que iban a tener muchos Roland Garrós por delante... y por las dudas, se fue.
Claro, le tocó debutar contra el 3o. O contra el primero, si dejamos de lado los dos extraterrestres que hoy dominan el panorama.
Y perdió. En el tenis la lógica se impone más que en el fútbol.
Pero quiero destacar algo de esa derrota.
Si uno ha alcanzado su mayor nivel posible, y juega con todo ese potencial, y pierde, es porque el rival es superior. Las únicas chances de volver a jugar con él y ganarle, son sólo cuestión de suerte, porque si ambos hemos alcanzado nuestro máximo nivel y el rival nos vence, es difícil que podamos ganarle alguna vez si la suerte no nos ayuda. Le pasó miles de veces a Vilas con Connors.
Pero Del Potro no está en su máximo nivel. No perdió porque el rival fue superior: perdió porque muchísimas devoluciones suyas se estrellaron en la red.
Le falta afinar un poco esos tiros, tan solo.
Estoy seguro de que el próximo partido con el serbio le gana.
Le deseo suerte.
(Aunque igual la Davis la gana España).